Instalaciones ganaderas. Fundamento de las granjas de animales modernas
Para la construcción de unas nuevas y modernas instalaciones ganaderas o para la remodelación o modernización de una instalación antigua, es fundamental contar con todo aquello que afecta o se ve afectado por el comportamiento animal. Pensar en la conducta de los animales que vamos a manejar en la granja y la relación evolutiva que vienen teniendo con el hombre como animales domesticados, como por ejemplo la docilidad frente al hombre, o su agresividad, son muy importantes a la hora de diseñar la instalación para una optimización del manejo y los recursos.
Con el mismo grado de importancia estaría también el diseñar adecuadamente el grado de confinamiento de los animales, según los diferentes momentos de la vida o procesos productivos de la especie que hayamos elegido. Con relación a este tema y por fortuna, podemos encontrar hoy en día abundante normativa y bibliografía que nos guiarán para alcanzar un diseño más óptimo.
Dado que hoy en día una inversión en ganadería se ha pasado a considerar una industria como otra cualquiera, y desde luego el que no piense así estará fuera del mercado pues no logrará nunca una rentabilidad adecuada dada la gran eficiencia actual del sector, pues como decimos no debe cegarnos por ejemplo el querer meter a los animales en estabulaciones que les imposibiliten el movimiento, sino todo lo contrario, hay que evitar a toda costa que la imposición de alojamientos y de movimientos pueda ocasionarles agobio y estrés, pues recordemos que este estado anímico sólo conlleva una menor conversión de alimento por kilo de carne (por ejemplo), pero sobre todo conlleva en una bajada de las defensas tal y como por ejemplo le ocurre al hombre cuando está estresado. El estrés sólo provoca mayor riesgo de enfermedades e incluso de padecer cáncer, pues el sistema inmune no está a pleno rendimiento para luchar contra las bacterias y los virus, ni contra sus propias células tumorales (que todo ser vivo tiene en su organismo).
Granjas de animales
Así pues hay que estudiar los hábitos del tipo de animal por el que nos hemos decidido apostar para nuestras instalaciones ganaderas, y en base a los mismos diseñar los corrales y los patios, los tránsitos y el abastecimiento, siempre pensando que al igual que nos pasaría a nosotros, el animal debe tener una cierta libertad de movimientos, una cierta libertad de decisión. En otras palabras, es mejor para el rendimiento y la conversión, que el propio animal quiera por ejemplo comer y beber libremente, que obligarle a ello a la fuerza mediante el alimento en la boca a la fuerza. Entre otros aspectos a tener también en cuenta, estaría el que el animal pueda ejercitarse de acuerdo a su conducta típica o genética.
Recordemos que todo ser vivo se adaptaría o acomodaría al final a su cautiverio, y trataría de convivir con el mismo, con lo cual podría parecer al ganadero, que todos estos aspectos no tienen importancia, “porque como no se queja el animal…”, pero todos sabemos reconocer que su aspecto físico y su salud variarán completamente si el animal no se siente esclavizado, atado, guiado, y por el contrario puede gozar de una cierta libertad y felicidad dentro de su granja. En el rendimiento del animal, en su conversion, notará usted perfectamente estos aspectos si es que modificara usted en el tiempo el diseño de sus granjas de animales.
Resulta también muy importante pensar, en unas nuevas instalaciones ganaderas, en los sistemas de alimentación, evacuación de eyecciones, en el gasto energético, en el manejo de los animales por toda la granja, y en general en todos aquellos aspectos que influyen en la economía diaria de la instalacion ganadera.
Como resumen a esta breve introducción, no hay que olvidar que cuesta lo mismo prácticamente diseñar nuestra instalación de cualquier manera y forma, que ponernos antes a estudiar en la bibliografía existente, sobre cuáles son las condiciones ideales de vida, las conductas y el espacio que el animal de granja que hayamos elegido necesita para una vida saludable, así mismo cuesta poco planificar antes cual es la distribución ideal y las instalaciones mínimas que nos pueden llevar a un ahorro importante en el gasto de personal para el manejo de los animales. Todo esto influirá decisivamente en el rendimiento de su instalación ganadera, pues al fin y al cabo es el verdadero y último objetivo de todo ganadero quiere al invertir en unas nuevas granjas de animales o al mejorar sus antiguas instalaciones.